Córdoba, día 4

Me acosté tarde, no dormí muy bien, y esa mañana, a pesar de eso, desperté "altiro" (se ríen mucho de esa palabra acá). Pero lo que no dormí en la noche, lo dormí todo en la primera charla!!! jajaja!! en fin... eramos varios en esa... o pocos si consideramos los que llegaron.

Esa mañana hubo un par de chalras entretenidas y unas muy lateras... q eran de "radiobiología" q más parecía bioquímica.... no entendía nada entre todos los nombres de proteínas, cadenas eternas de carbono, y la palabra "apoptosis" que ni idea de lo que era... y eteeeeeeeeerna. Lo peor eran esas "animaciones" de las diapositivas, que lo único que hacían era entorpecer y hacer más latero todo... deberían poner un límite de animaciones. No más de 1 por diapo.... y eso es mucho.

Ese día almorcé con Egle, Diego, y varios más en el Shhhhhopìng. Egle me invito a su cumpleaños esa noche. Ella es muy simpática, me dio la dirección y las indicaciones para el taxi, y la verdad es que me moría de lata de quedarme sola en el hotel.

Después fui a la última charlita, a la salida hablé con un doctor francés muy simpático, que trabaja en el instituto Marie Curie.

En la tarde me cambié de hotel a uno más céntrico. Salí a caminar un rato, con un mapita que me dieron en el hotel, pero que era más o menos grande, así que no quería andar mostrándolo a todo el mundo "hola, soy turista".

Lo primero que hice fue buscar un teléfono para avisar que estaba todo bien. El tipo del hotel me dijo que en la esquina había uno... y fui, pero el chico que atendía no estaba, asi que empecé a caminar en busca de otro.... ni idea por dónde caminaba, porque no quería sacar el mapita...

estaba todo cerrado, pues atendían sólo el sábado en la máñana en el centro.

Al fin, llegué a unas cabinas en una calle X. Hablé un rato y al momento de pagar, tenía un billete grande, y varios chicos, pero que no me alcanzaban para pagar...

-no tienes vuelto de $100?

-yyyyy noooo, que no ha venido naaadie hoy

-pucha... (sí, pucha, soy chilena)... y qué puedo hacer....

(se encoge de hombros)

-te puedo dejar algo, y lo vengo a buscar cuando te venga a pagar?

-Bueno

(Qué le dejo, qué le dejo.... no tenía nada)

-Toma, mi carnet de identidad, así te aseguras de que tengo que venir a buscarlo... no! mejor que no, porque si me pasa algo, esto es lo único que tengo y me sirve... te dejo mi licencia de conducir, bueno?

- Bueno

Me iba yendo... y me di cuenta de que ni idea de dónde estaba parada, así que ni idea de dónde tenía que volver. Ya estaba oscuro, el centro cerrado... miré el letrerito de las calles y me repetí tres veces "ayacucho con dean funes, ayacucho con dean funes, ayacucho con dean funes".

Caminé, hasta encontrar un café abierto. Me tomé un café con leche con facturitas, abrí mi mapa enorme, y caché dónde estaba, y para donde tenía que caminar. Pagué con mis $100, y volví al lugar del crimen a recoger mis pertenencias.

Me fui a dar un paseíto al patio olmos... miré un ratito, nada más, andaba sin plata y pensé en volver al dia siguiente. Comí una hamburguesa y me fui al hotel.

Me fui al cumple de Egle, que me había anotado todas las indicaciones en una servisheta.

Fue muy entrete. Ella cumplía 29, pero fue algo como muy familiar... o al menos me sentí como en familia. Estaba su hermano y la cuñada, que eran más jóvenes, y el resto era pura gente que trabajaba en el servicio de radioterapia... tecnicos, ingenieros, fisicos..incluso estaba una de las "profes" de ella, y amiga de Daniel, que dió un par de charlas en el congreso.

Me dieron a probar fernet con coca-cola... "ehm...prefiero coca cola sola, gracias". No me gustó para nada. Comimos una tortita hecha por egle, bastante rica, con crema y chocolate.... muuuucho chocolate. Conversamos un rato, y el hermano y la cuñada hicieron un twister casero, y empezamos a jugar eso... Habían varios que no sabían, y yo sí, así que jugué en la primera tanda... me caí altiro (sí, "altiro") porque no soy muy flexible que digamos y me empezaron a doler las piernitas... y al intentar acomodarme, me caí. Después jugó el resto de la gente y nos reímos mucho. También había karaoke, y tenían muuuucha música. Igual, la mayoría argentina, así que no cachaba mucho ciertas cosas que cantaban. Pero de repente dijeron "tenemos La Ley!! Que cante la chilena!!!"
Y bueno, yo no soy muy fanática de la ley, y cacho los coros, con suerte, así que no lo intenté, pero me puse a mirar si tenían algo que cachara y pudiera cantar. Tenían Jesucristo Superestrella, pero no quise arriesgarme a quedar como, ehm, freak, por saberme esas cosas. También tenían a Miryam Hernández... atroz. Canté Yesterday, de los Beatles, y después encontré una de los prisioneros también.
Fue entrete.... lo pasé bien. Extrañamente me sentí en confianza para hacer el ridículo. Fue bueno eso :P.